Un
tazón de café,
el
retumbo recurrente
de
la ducha,
balbuceos
de
actualidad en las ondas,
fragancias
de rutina
en
la mañana
renovada
Cláxones
impertinentes,
rumores
de monóxido
entre
neones anónimos,
prisas
en la comisura
de
la saliva,
el
tiempo que se disgrega
a
borbotones
de
tropiezos y desorden
Gustillo
a vanguardia,
reminiscencias
de futuro,
descuidos
de presente,
demora
en la estación
del
instante
desvanecido
en
los andenes del abandono
Estrés
en la retina
de
una mirada solitaria
en
un océano de gentes,
una
mañana cualquiera
de
algún término sin nombre,
una
leyenda sin dueño
sin
cuño… sin remitente….
En "Alambique de vestigios"
Editorial Quadrivium
Francisco J. Picón
Todos los derechos reservados en el Registro de la Propiedad Intelectual
Letras tuyas que van hilvanando las mas variadas y vividas sensaciones,sabes envolver mi corazón con cada entrega!! !!,amo tu pluma querido escritor!!!
ResponderEliminarMi eterna gratitud, Lidia, un beso!
EliminarA ti escritor.
EliminarQué bonito comienzo y qué bonita reflexión desde un cafe matutino, Fran. Un placer leerte. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Marcos, un fuerte abrazo!
EliminarCada día nos golpea de igual forma.
ResponderEliminarSaludos.