Silencio…
parajes en la montaña
desnuda de prisas
carreteras sin final
circunvalando olvidos
rocas con formas
extrañas vigilando el destierro
hielo en las
entrañas, vahídos de ausencias…
música en la retina,
susurros en las pupilas
calma sin tormentas
en la piel de un cansancio
aislamiento de rutinas,
abrazos al murmullo de los sueños
paisaje de estrellas
en el firmamento de la mirada…
Silencio…
tiempo para el
pensamiento, momentos para la espera
dibujos en las
estelas de las nubes del reposo
barro en las suelas
de la soledad, telarañas en las manos
pausa en las caderas,
penumbra en el rincón de la memoria…
humo en la chimenea
arropando el lecho de la monotonía
sonidos a naturaleza
viva, borbotones de savia entre los dedos
saetas sin rumbo
detenidas en el umbral de las ruinas del tiempo
paréntesis en el
estrés que decora el vagón de la senda cotidiana…
Silencio…
De "Con la vida a cuestas. Nuevas cuestas"
Francisco J. Picón
Todos los derechos reservados en el Registro de la Propiedad Intelectual
Hay veces que es mas reconfortable un buen silencio que mil palabras.Un abrazo
ResponderEliminarUn abrazo, Vicente!
ResponderEliminarEl umbral que separa el silencio que mata del que resucita y da la vida, es seguramente el que deba ser faro. Bs
ResponderEliminarAsí es, Laura, un beso!
Eliminarel silencio, protagonista de tantas visiones y pensamientos,
ResponderEliminarsaludos
Un abrazo Omar!
EliminarEl silencio mudo, largo, de una longitud que pesa, se hace en el pensamiento un roedor muy suspicaz. El silencio a veces es un mal parido compañero.
ResponderEliminarAbrazos
Misk
Hola, Misk, un placer recibirte por aquí y leer tus palabras. Un abrazo.
ResponderEliminarSilencio... ese silencio tan necesario a veces, tan doloroso... a veces. Me encanta leerte Fran, tienes una hermosa manera de moldear las palabras y transformarlas en paisajes, aromas y sentimientos. Gracias por compartir. Un beso
ResponderEliminarGracias a ti, Ángela, un lujo para mí que me leas. Un beso
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